Emilio Tuñón recibe en Cáceres el Premio Nacional de Arquitectura 2022 por su dominio de la técnica y la estética

La ministra de Transportes, Raquel Sánchez, destaca “su vocación de entrega a la comunidad y su impacto social”

CÁCERES, 23 (EUROPA PRESS)

El arquitecto Emilio Tuñón ha recibido este jueves en Cáceres el Premio Nacional de Arquitectura 2022, de la mano de la ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez. Se trata del máximo galardón español en el campo de la arquitectura, dotado con 60.000 euros, con el que se premia el trabajo de este madrileño que ha conseguido convertirse en un referente para la arquitectura, tanto a nivel nacional como internacional.

La ceremonia de entrega ha tenido lugar en el complejo cultural San Francisco de la capital cacereña, ciudad donde Tuñón ha dejado su impronta en cinco obras como el hotel Atrio o el Museo de Arte Contemporáneo Helga de Alvear, entre otras que se pueden admirar en ciudades como Zamora, León o Castellón.

A la hora de conceder este premio, el jurado destacó especialmente “la coherencia de su obra arquitectónica que recoge de manera natural sus inquietudes teóricas, su dominio sobre las técnicas constructivas y su vocación de servicio a la sociedad que solo se entienden desde su rigurosa trayectoria académica”. La candidatura del “prestigioso arquitecto” fue promovida por el Colegio Oficial de Arquitectos de Extremadura (COADE), dada su dilatada trayectoria profesional de enorme calidad, con abundante y destacada obra en Extremadura.

Emilio Tuñón, “un extremeño nacido en Madrid”, como él mismo se ha definido, ha dicho que decidió estudiar arquitectura cuando con ocho años descubrió la Mezquita de Córdoba y supo la importancia de intervenir en los conjuntos históricos, donde ha desarrollado gran parte de su vida profesional, en la que ha firmado 18 grandes obras.

En su discurso ha agradecido el premio a su familia, a sus compañeros y a los clientes que le han encargado los trabajos porque “ninguna obra se puede hacer sin un cliente inteligente y sensible” y sin “personas que buscan la excelencia para servir a la sociedad” porque la arquitectura “solo tiene sentido como disciplina si se pone a disposición de la sociedad”.

“La arquitectura solo se puede llevar adelante con optimismo”, ha indicado en otro momento de la gala en la que ha destacado que “la fuerza y el entusiasmo son las mejores herramientas porque lo más importante del trabajo es mejorar la vida de la gente, priorizar el nosotros sobre el yo”. “Cada uno de nosotros somos las personas que nos rodean, yo soy vosotros, el premio es vuestro”, ha concluido.

Durante el acto, la ministra Raquel Sánchez, ha destacado la calidad y la excelencia de las creaciones de Emilio Tuñón, además de “su vocación de entrega a la comunidad y su impacto social”. Según ha remarcado, el galardonado entiende su profesión como un servicio público que, más que al autor, pertenece a la gente.

Para la ministra, el itinerario profesional del galardonado se refleja en una frase del arquitecto y teórico Le Corbusier que decía que “la arquitectura es el punto de partida del que quiera llevar a la humanidad a un porvenir mejor”. Así, ha recalcado la generosidad de Tuñón por entender la profesión como un “patrimonio de todos” y su arquitectura “discreta”, mediante la que establece “vínculos con el lugar y con la memoria”.

PASIÓN POR LA VIDA

Asimismo, ha enfatizado la “pasión por la vida” del arquitecto, quien ha hecho de su carrera “una conversación ininterrumpida con la vida”, convirtiéndolo en su método para conocer la realidad. Además, ha apuntado que “las obras de Emilio conversan entre sí” y, en cierto modo, “se encadenan, de forma que la nueva partida empieza donde acabó la anterior”.

El director general de Agenda Urbana, Iñaki Carnicero-Colmenares, ha destacado que el jurado ha valorado de Tuñón, además de su obra construida, la generosidad de su labor docente en la que ha ayudado a entender la arquitectura como una herramienta de pensamiento, que se ha materializado en edificios integrados en el entorno que buscan “la satisfacción colectiva de la sociedad”.

Por su parte, el presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, ha resaltado la figura de Tuñón que “es uno de nosotros”, debido la impronta que ha dejado en la región, como el Museo de Arte Contemporáneo Helga de Alvear que “aunque esté vacío sigue siendo un museo”, ha dicho, en alusión al propio edificio diseñado por el premiado.

Se trata además de una obra que sirve para unir una parte de la ciudad con otra y produce una regulación urbanística de la ciudad. “Tú nos has enseñado muchas cosas”, ha dicho el jefe del Ejecutivo regional, que ha concluido que Tuñón “ha hecho grande a Cáceres” y “Cáceres ha hecho grande a Tuñón”.

Finalmente, el alcalde de Cáceres, Luis Salaya, ha agradecido que se haya elegido la ciudad para entregar este premio por la relación del galardonado con la capital cacereña, que empezó hace muchos años y que ha servido para “proyectar otra imagen hacia dentro y hacia fuera”. “La obra de Emilio Tuñón cambia la imagen de la ciudad y hace que no solo sea conocida por ser Patrimonio de la Humanidad sino también como una ciudad abierta y moderna”, ha indicado el regidor.

La gala presentada por el periodista Juan Luis Cano ha contado con la intervención del director de la Escuela Superior de Arquitectura de la Universidad Politécnica de Madrid, Manuel Blanco, que ha sido el encargado de pronunciar la ‘laudatio’. Entre los asistentes se encontraban arquitectos de toda España como Rafael Moneo, o los dueños de Atrio, José Polo y Toño Pérez, entre otros muchos invitados que han podido asistir a la actuación de la extremeña Celia Romero, acompañada a la guitarra por Francisco Pinto.

A esta ceremonia de entrega también han asistido otras autoridades como la presidenta de la Asamblea, Blanca Martín; el delegado del Gobierno en Extremadura, Francisco Mendoza, o los presidentes de las diputaciones de Cáceres y Badajoz, entre otros.

BIOGRAFÍA DE EMILIO TUÑÓN

Emilio Tuñón Álvarez (Madrid 1958), es arquitecto por la ETSAM en 1981, y Doctor por la ETSAM en 2000, Premio de Arquitectura Española 2003, Medalla de Oro por los Méritos en las Bellas Artes 2014, Premio de Arquitectura Contemporánea de la Unión Europea, Mies Van der Rohe Award 2007, Premio Arquitectura Española 2017 y RIBA International Fellowship 2019.

Es catedrático del Departamento de Proyectos Arquitectónicos de la ETSAM en la Universidad Politécnica de Madrid, ha coordinado varios másteres y ha sido profesor invitado en universidades de Alemania, Suiza, EEUU, o Puerto Rico, entre otras.

En 1990 funda con Luis Moreno García-Mansilla la oficina de arquitectura Mansilla + Tuñón Arquitectos. Con Luis Moreno ha construido el Museo Provincial de Arqueología y Bellas Artes de Zamora (1996), el Centro de Natación en San Fernando de Henares (1998), el Museo de Bellas Artes de Castellón (2000) y el Auditorio de León (2002).

También diseñaron el Centro Documental de la Comunidad de Madrid (2003), el MUSAC de Castilla y León (2005), la nueva sede de la Fundación Pedro Barrié de la Maza en Vigo (2006), las dos casas gemelas en Zahara de los Atunes (2009), el Ayuntamiento de Lalín (2011) y el Hotel Atrio Relais Chateaux (2011) de Cáceres, que ha obtenido varios premios.

Tras el fallecimiento de Luis Moreno García Mansilla, Emilio Tuñón funda Tuñón Arquitectos SLP en 2013, que ha construido la nueva Sede de Arquia Bank en Madrid (2022), rehabilitación Casa Palacio Paredes Saavedra en Cáceres (2023), Cabaña de piedra y teja reciclada en la Laguna Negra (2022), Fundación Helga de Alvear en Cáceres (2021), Casa de Ladrillo en Madrid (2021), Casa de Piedra en Cáceres (2019), Gastropabellón en la ETH de Zurich (2017).

En su palmarés cuenta con el Premio de Arquitectura Española de 2003, el Mies Van der Rohe en 2007, la Medalla de Oro de Bellas Artes en 2014, el Premio de Arquitectura Contemporánea de la UE.