La Guardia Civil ha identificado al conductor de un turismo que fue sorprendido conduciendo a una velocidad de 182 kilómetros por hora en la carretera N-523, que conecta Cáceres con Badajoz. La velocidad máxima permitida en esa vía es de 90 kilómetros por hora.
Además del exceso de velocidad, al conductor se le realizó la prueba de drogas obligatoria, y los resultados arrojaron un resultado positivo en cocaína. Este hallazgo agrava aún más la situación del conductor.
Los hechos ocurrieron el pasado 30 de mayo durante un dispositivo de control de velocidad establecido por la Guardia Civil en la carretera N-523, en el municipio de Cáceres. Este dispositivo forma parte de la vigilancia de las vías con mayor índice de siniestralidad.
El conductor, un hombre de 52 años, ha sido investigado y puesto a disposición del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Cáceres por presuntamente cometer un delito contra la seguridad vial al circular a una velocidad superior en más de 80 kilómetros por hora a la permitida.
También fue denunciado ante la Jefatura Provincial de Tráfico de Cáceres por una infracción muy grave contra la seguridad vial.
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