Cáceres está de luto por la pérdida de un destacado referente en la defensa de la ciudad y la naturaleza. Santiago Hernández Fernández, un cacereño comprometido con la ingeniería, el medio ambiente y el ecologismo, falleció en su hogar de Cáceres en la madrugada de hoy, víctima de una parada cardiorespiratoria. Su partida se produce después de haber estado hospitalizado en el Hospital Parque San Francisco durante varios días.
La pasión de Santiago por la naturaleza se gestó desde temprana edad, bajo la influencia de su padre. A lo largo de su vida, acumuló una impresionante trayectoria profesional y un extenso currículo que respaldaba su dedicación a la defensa del entorno. Santiago era Doctor Ingeniero de Caminos, Canales y Puertos, y ocupó roles destacados como presidente de Adenex, delegado de Renfe en Extremadura, decano del Colegio de Ingenieros de Caminos de Extremadura y Medalla de Honor del Nacional. Además, presidió el Patronato de Monfragüe, fue un experto en impacto ambiental de la ingeniería, recibió el Premio Nacional de Medio Ambiente, lideró la Comisión de Medio Ambiente del Consejo Europeo de Ingenieros Civiles y fue académico correspondiente de la Real Academia de Medicina de Zaragoza.
Santiago Hernández también era un amante de la fotografía y se destacaba por su carácter familiar, sencillo y apasionado. Siempre se mostró comprometido e inquieto, además de ser un gran conversador. Valoraba la importancia del conocimiento por encima de la demagogia. Nacido en la Plaza de Santiago, al igual que sus dos hijos, Santiago y Moisés, creció en la plazuela de Santiago, donde disfrutaba jugando a los bolindres y las chapas. A lo largo de su vida, se erigió como uno de los principales defensores de Cáceres y del medio ambiente. Su legado perdurará en la memoria de la ciudad que tanto amó.
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