Las obras comenzarían a mediados de 2025 con una inversión total de 38 millones de fondos Feder
CÁCERES, 15 (EUROPA PRESS)
El Plan Director para los nuevos usos del edificio del Hospital Nuestra Señora de la Montaña de Cáceres y la reforma del inmueble, que se espera comience en 2025, incluye una reestructuración urbanística de la zona donde se construirá un nuevo vial que comunicará la avenida de Hernán Cortés con la avenida de España, por detrás del edificio de servicios Múltiples y rodeando parte de la parcela donde se ubica el hospital.
Se eliminarán las escaleras laterales que existen ahora mismo para crear una calle de tránsito peatonal y de vehículos, y se echará abajo el muro de separación de la parcela para integrar el nuevo conjunto urbanístico con el Paseo de Cánovas. La reforma contempla también la construcción de un nuevo auditorio en el sótano del patio central con acceso directo desde la fachada principal del inmueble.
Todo ello se contempla en el Plan Director que se ha presentado este jueves por parte de los responsables de las administraciones que conforman la comisión de seguimiento que se creó para buscar un uso al edificio del antiguo hospital, que se cerró una vez se puso en funcionamiento del Hospital Universitario de Cáceres (HUC).
El edificio albergará el Conservatorio de Música Hermanos Berzosa; el Conservatorio Profesional de Danza de Cáceres; la Escuela Superior de Arte Dramático (ESAD); el Punto de Atención Continuada (PAC); un Centro de Salud; el servicio de Salud Mental, y el Centro de Drogodependencias de Extremadura (Cedex). Además, la antigua central térmica del hospital, ubicada en un edificio justo detrás de la Biblioteca del Estado, se utilizará para ampliar este edificio, que también se ha quedado pequeño.
Todos los usos sanitarios se concentrarán en el ala este de manera que no interfiera con el resto de usos ubicados en el edificio. Para ello se prevé una ampliación en el bajocubierta que contendrá el Cedex. En las plantas baja y primera se ubican el PAC y el Centro de Salud, con accesos independientes y se deja la planta segunda para Salud Mental. Además, se plantea un acceso general para los usos sanitarios salvo el PAC, por su funcionamiento y horario diferenciado.
En el Plan Director se propone también la construcción de un auditorio en la planta sótano como uso propio del edificio (Conservatorio y ESAD), además de como uso público con acceso desde el exterior, así como varias estancias con necesidades de mayor superficie y cuyos usos complementarán al auditorio. Se separa la zona de Danza y se ubica en un edificio de nueva construcción proyectado en la calle trasera.
También se plantea utilizar el escenario para dos aulas de 100 metros cuadrados compartimentado con paneles móviles. De este modo, los espacios que tienen menor uso se pueden utilizar con más frecuencia.
Se demolerán las dos entreplantas existentes, así como las ampliaciones añadidas en el patio y en la fachada noroeste y, de esta forma, se recuperará el patio como apoyo a los diferentes usos previstos en el edificio. También se formalizarán espacios ajardinados y zonas para representaciones y exposiciones al aire libre.
Con todo ello, se confirma que el edificio, que se inauguró en 1892, tendrá usos sanitarios, culturales y educativo, como se había anunciado por parte de las administraciones que configuran la comisión de seguimiento del futuro del hospital provincial: la Diputación de Cáceres, la Junta de Extremadura y el Ayuntamiento.
El proyecto se financiará con cargo a los fondos Feder del programa operativo 2021-2027 y asciende a un total de 38 millones de euros que están “solicitados, comprometidos y aprobados”, según ha indicado el secretario general de Presidencia de la Junta de Extremadura, Fernando Blanco.
Blanco ha asistido a la reunión de la comisión de seguimiento junto al presidente de la Diputación de Cáceres, Carlos Carlos; el concejal de Infraestructuras del ayuntamiento cacereño, Andrés Licerán; y el subdirector de obras del Servicio Extremeño de Salud (SES), Sergio Garrido, al que se le ha encomendado la coordinación de todo el proyecto, en el que están implicadas varias consejerías.
LAS OBRAS COMENZARÁN EN 2025
En cuanto a los plazos que se barajan, según se recoge en el Plan Director el proyecto y la dirección de obra se espera salgan a licitación en el año 2023; también en ese mismo año estará preparada la redacción del proyecto para que en el 2024 pueda llevarse a cabo la supervisión del mismo y, a finales de ese mismo año, la licitación de las obras. De esta forma la ejecución de la remodelación integral del edificio podría comenzar a mediados del año 2025.
El secretario general de Presidencia de la Junta de Extremadura ha explicado la necesidad de un Plan Director para disponer de la hoja de ruta y la visión de conjunto de las actuaciones que se deberán llevar a cabo en el antiguo hospital, y ha añadido que “el Plan se basa en estudios previos realizados por un equipo multidisciplinar con la voluntad de coordinar coherentemente y bajo similares criterios de actuación las distintas fases de intervención”.
“Había que buscar la mejor solución para la ciudad desde el punto de vista de integración al entorno, respeto al patrimonio histórico y cultural, una funcionalidad social, económica y ambiental, y se quiso hacer desde el consenso”, ha añadido.
La descripción de la intervención ha sido expuesta este jueves por el subdirector de Obras, Instalaciones y Equipamiento del Servicio Extremeño de Salud (SES), Sergio Garrido, quien ha señalado que la actuación “se centra en la recuperación del edificio consiguiendo su rehabilitación completa”.
El presidente de la Diputación de Cáceres, Carlos Carlos ha señalado que el proyecto “no tiene marcha atrás” y ha resaltado que el objetivo es la adaptación del edificio para los usos sanitario, cultural y educativo, y a la vez integrar el conjunto perfectamente en el centro de la ciudad.
Por su parte, Andrés Licerán, concejal de Infraestructuras del Ayuntamiento de Cáceres ha manifestado que darle un uso al edificio era un reto que había que afrontar para no dejarlo cerrado durante años. “El requisito era que el edificio viniera a cambiar el centro de la ciudad, a dinamizar una zona que pudiera ser complicada y que tuviera vida durante todo el día y no solo en horario administrativo”, ha apuntado.
Cabe recordar que el edificio, propiedad de la diputación cacereña y que se inauguró en 1892, se cedió en su día al entonces Insalud y después al Servicio Extremeño de Salud (SES) para uso sanitario pero, tras su cierre como hospital, la propiedad volvió a la institución provincial que lo cede de nuevo a la Junta de Extremadura que será la administración encargada de su rehabilitación.
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